Hermanita...

 

 

Hoy hace una semana... Siete días de mar abierto, con sus olas de fondo y la incertidumbre de estar en medio de la nada. Sin un día a la semana en el que vernos, con el tiempo libre dispuesto a una visita relámpago y el móvil en la mano listo para marcar tu número o descolgar... Para que me cuentes y contarte, para estar.

Te echo de menos, y me jode, me jode muchísimo. Así es la parte humana, y tiene que doler, no queda otra... Pero sé que pasará, que el tiempo no curará nada, como mucho lo que hará es esconder y ocultar. Por eso prefiero no engañarme y estar triste o enfadada cuando el ego empequeñece mi visión y la reduce a esta ilusión. Sé que estás, sé que estoy. Que para el Alma no existe tiempo ni espacio, que lo único que dejaste fue un cuerpo y una personalidad para evolucionar. Pero te extraño, coño, te extraño tanto...