PRIMERA PLAYA PARA PERROS EN TENERIFE

¡Por fin nuestros perros pueden ir a la playa!

Durante muchísimo tiempo, hasta el pasado viernes, los amantes de los animales hemos tenido que hacer verdaderos malabarismos para que nuestros amigos de cuatro patas pudieran disfrutar de la playa. 
Simplemente, pasear a nuestros perros por la costa suponía una sanción de hasta 3.000 euros, dependiendo del municipio. Los argumentos para tal prohibición (palabra que me gusta bien poco, o mejor dicho, nada) van desde que molestan a los demás, hasta la higiene. Ejem. Los perros no orinan en el mar y tampoco te tiran la pelota en la cabeza. Son sus dueños, es decir, las personas, quienes pueden ocasionar molestias a los demás y no los animales, porque son éstos quienes no recogen sus colillas, su lata de cerveza, su vaso de plástico..., no tienen en cuenta a los demás a la hora de sacar una pelota, elegir melodía para el móvil o subir el volumen de la música hasta límites insospechados y si tienen ganas de miccionar, el mar es el mejor sitio. Realmente, ¿quiénes molestan o ensucian? Al final, los que pagan la factura de las irresponsabilidades ajenas, son nuestras mascotas.

Ahora, en Tenerife, se ha destinado una playa para que nuestros perros corran, se bañen, jueguen y se relacionen con otros. Se trata de la cuarta playa, pegada al Club Náutico situada en el Puertito de Güímar. Esperemos que pronto, otros municipios se unan a éste y hagamos que nuestras playas y costas estén libres de prohibiciones y prejuicios, imperando el sentido común y el amor por éstas.